Por Guadalupe Treibel
Suave y tierno -como precisamente reza su
canción Soft & Tender- es una
buena manera de definir el manojo de temas que firma November Ultra, nom de
plume que se inventó mezclando el mes de su nacimiento (noviembre) con un guiño
al alabado Nostalgia, Ultra, mixtape
de Frank Ocean, uno de sus álbumes favoritos. Aunque, ojo, el vocablo ternura no
equivale a cursilería ni excluye el desencanto…
Con una voz bien expresiva, pletórica en
matices, que van del susurro al estallido lírico, cuando pensamos que tenemos
descifrada una cadencia o una poesía, Nova (como le dicen sus amigas, y el
periodismo en general, por la intensidad de la supernova, bella y catastrófica
explosión estelar) propone un giro inesperado, ya sea en la interpretación o en
la melodía, en composiciones mínimas salpicadas por r&b, flamenco,
etcétera, donde la experimentación está a la orden del día. Un ejemplo sería Nostalgia/Ultra, donde una de las
sorpresas es una charlita… con sus abuelos, María Isabel y Ramón.
Nova, que creció en Boulogne-Billancourt y es
multiinstrumentista, suele contar que canta desde los 3 justamente gracias a
Ramón, que le enseñó tempranamente coplas de su España natal, además de
compartir con ella sus musicales preferidos: La novicia rebelde, West
Side Story, Las señoritas de
Rochefort… Inspiraciones que la han marcado tanto como Lorde o Harry
Styles. “Mi abuelo es enfermero pero creo que siempre soñó con ser músico, como
mi madre: una portera que terminó el secundario a los 34 años. En los círculos
de la clase trabajadora, ser artista no es precisamente un plan de carrera”,
comparte November, de mamá ibérica y papá portugués, fichada por Universal tras
un estallido en redes (Camila Cabello y Madonna, algunas de las que
compartieron sus primeras composiciones).
Dicho lo dicho, aclara que “no hay nada más
bonito que romantizar tu vida”. Palabras textuales de Mélanie Pereira (tal su
nombre de nacimiento), de 33 años, que gusta vestir tul, grandes abrigos rosados.
Expresar los sentimientos no está pasado de moda, sostiene esta chica
profundamente tímida, que se anima a decirse a sí misma, a expresar sus
ansiedades y sus miedos en un mundo tremendamente hostil. Con canciones que,
tal cual destaca la prensa, “nos recuerdan lo más obvio y simple del mundo: la
belleza de las cosas”.
Vale decir que la chica canta mayormente en
inglés, aunque echa mano del castellano y francés en algunas letras. La elección,
a su decir, responde a razones: “Nos pasamos la vida pensando que tenemos que
elegir, limitarnos a una identidad precisa, una etiqueta, una emoción, una
mitología, cuando en verdad todos somos seres en movimiento, cambiantes y
complejos. Soy muy afortunada de ser hija de inmigrantes y de haber crecido con
todos estos idiomas que tienen sus propios códigos”.
Por lo demás, Bedroom Walls (sucesor de un ep y algunos singles) llega tras pasar
Nova por la banda indie pop Agua Roja, trío que formó con Benjamin Porraz (hoy guitarrista de Clara Luciani) y Clément
Roussel (productor e ingeniero de sonido). “Quedamos en muy buenos términos,
pero -en lo personal- necesitaba salir del confort del grupo porque, durante
mis cinco años con ellos, estuve arropada. Y la compañía quita miedo, pero
también es bueno probar que sos capaz de hacerlo sola. Creo que fue Bowie el que
dijo: cuando estás en el mar, tenés que ir al lugar donde no hacés pie, porque
ahí es donde suceden las mejores cosas”.
Previo a su primer disco, Nova también venía componiendo para terceros: Jaden Smith (hijo de Jada Pinkett y Will), Terrenoire (revelación masculina en las Victoires de la Musique), Barbara Pravi (finalista de Eurovisión), entre ellos. Tiene, además, un máster en traducción audiovisual, con especialidad en subtitulado para personas con sordera e hipoacúsicos. Y es dueña, dicho está, de una voz cristalina por la que, aconsejan melómanos europeos, da gusto dejarse arrullar.